El trabajo de las mujeres
Las denuncias del jerezano Ramón de Cala en 1884


EL TRABAJO DE LAS MUJERES
Ramón de Cala, 1884

"Por una regla insostenible en el sentido de la justicia, y explicable por el hecho de que los hombres mandan, la pobre mujer se encuentra deprimida en la sociedad. Sus derechos están negados en algunos países, y disminuidos aun en los que de civilizados se precian. Viven bajo el poder de los hombres en un género de sumisión, que difiere poco de la servidumbre, templada solo por la galantería.

En el orden económico, la mujer como el hombre es un instrumento de producción, porque lo es del trabajo; pero con este carácter precisamente sufre las injusticias mayores. El varón todo lo invade, hasta las ocupaciones que por delicadas deberían ser mujeriles, y la hembra queda relegada a los servicios domésticos y á pocas funciones más

Sobre todo, para colmo de la injusticia, se retribuyen menos, mucho menos, sus trabajos que los que el hombre ejecuta absolutamente iguales: el sastre gana doble que la costurera; el criado más que la criada… Las dificultades de conseguir trabajo y lo miserable de la retribución, son peligros permanentes para las pobres trabajadoras.



[…] Ya he dicho que la mujer, en igualdad de condiciones, gana menos salario que el hombre, y que las costumbres sociales la separan, en Andalucía más que en otras partes, aun de las ocupaciones á propósito para su naturaleza. En ciertos casos los capitalistas especuladores procuran servirse de las mujeres en determinadas faenas, no por un sentimiento de equidad, sino por el aliciente de la economía…


[…] De aquí que la iniquidad se perpetúe, sin que se alcance remedio, hasta el día, remoto quizás, en que los derechos sean derechos humanos, no de casta, clase, ni sexo, y comprendan á las mujeres al igual que á los hombres."

Ramón de Cala, El problema de la miseria resuelto por la harmonía de los intereses humanos (1884), Ayuntamiento de Jerez, Edición facsímil, 2002, págs.. 109-114.

4 comentarios :

Pepe García Oliva dijo...

Chapó

María Luisa dijo...

Gracias por el hallazgo.
Lastimoso pensar que una situación, denunciada en 1884, cueste que sea asumida por una parte de la sociedad tantos años después.

Juana Cla dijo...

Gracias por compartirlo Agustin!!

" De aquí que la iniquidad se perpetúe, sin que se alcance remedio, hasta el día, remoto quizás, en que los derechos sean derechos humanos, no de casta, clase, ni sexo, y comprendan á las mujeres al igual que á los hombres."

Apostemos fuerte porque ese dia sea el pasado 8 de Marzo de 2018.

AGL dijo...

Ojalá, Juana, ojalá...

 
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